El derrumbe parcial del edificio que alberga el Instituto Superior de Diseño Industrial (ISDI) en La Habana ha generado una ola de preocupación entre los habitantes de la ciudad y, en especial, los estudiantes y personal relacionado con esta institución.
Medios estatales, como el portal CubaSí, han actualizado la información sobre el incidente, detallando las labores de rescate y el impacto en las familias afectadas por el colapso.
¿Qué sucedió en el ISDI de La Habana?
El pasado viernes, un costado del emblemático edificio ubicado en el corazón de Centro Habana se derrumbó, dejando una gran cantidad de escombros en su lugar. Este colapso es el más severo registrado en los últimos dos años, según testigos del suceso, quienes aseguran que el deterioro acelerado del inmueble ha llegado a un punto crítico.
El ISDI, que durante años fue considerado un referente arquitectónico, está ahora marcado por las secuelas del deterioro estructural que, lamentablemente, ha alcanzado su punto más trágico.
El impacto del derrumbe: daños y personas afectadas
Afortunadamente, no se han reportado víctimas mortales, pero el incidente sí dejó a una persona herida. Un reporte de CubaSí indicó que una mujer de 78 años fue trasladada al hospital después del colapso. Hasta el momento, no se ha confirmado el estado de salud de la afectada.
Además, como consecuencia del derrumbe, cuatro familias han quedado imposibilitadas de acceder a sus viviendas, lo que genera un impacto social significativo en la comunidad.
Según declaraciones de autoridades habaneras a periodistas del Canal Caribe, la zona afectada ya había sido declarada en estado de derrumbe hace varios meses. Específicamente, desde hace cuatro meses, la empresa Gecal había iniciado trabajos de demolición progresiva de la estructura. No obstante, el colapso final no pudo evitarse.
El contexto del deterioro en el ISDI
Este no es el primer incidente en el ISDI. En julio de 2024, se produjo otro colapso parcial de la fachada interior del edificio, lo que llevó a las autoridades a cerrar la entrada al recinto. Desde entonces, los trabajos de demolición y restauración se intensificaron, pero no fueron suficientes para evitar el colapso total de la estructura.
El ISDI ha sido durante décadas un referente de la arquitectura y el diseño en Cuba, pero el paso del tiempo y la falta de un mantenimiento adecuado han cobrado factura. Este derrumbe refleja los desafíos estructurales a los que se enfrentan muchos edificios históricos en Cuba, donde el deterioro de las infraestructuras es un problema creciente.