A partir del lunes próximo, el gobierno cubano establecerá precios máximos de acopio y venta minorista para el arroz y el frijol común de producción nacional, como parte de un esfuerzo por controlar la inflación y mejorar la disponibilidad de estos productos esenciales para la población.
Los precios estarán limitados a 155 pesos por libra para el arroz y 285 pesos por libra para el frijol común, según el acuerdo aprobado por el Consejo de Ministros de Cuba y publicado en la Gaceta Oficial Extraordinaria número 7.
Regulación de Precios: Una Medida para Contener la Inflación
Según información publicada por la Gaceta Oficial, este acuerdo tiene como objetivo reducir la inflación, que ha afectado el poder adquisitivo de los cubanos.
Mayra Cruz Legón, directora jurídica del Ministerio de Agricultura (Minag), destacó que este ajuste de precios busca equilibrar las necesidades de los consumidores y productores, sin dejar de reconocer la importancia de mantener un margen comercial justo para los agricultores.
Esta medida también forma parte de la continuidad de la Resolución 225/2024 del Ministerio de Finanzas y Precios (MFP), que regula los precios de otros productos básicos.
En cuanto a los precios, se establecieron los siguientes valores en pesos cubanos (CUP):
- Arroz: 239,000 CUP por tonelada en acopio, con un precio de 155 CUP por libra en venta minorista.
- Frijol común con entrega de insumos: 304,360 CUP por tonelada en acopio, con un precio de 196 CUP por libra en venta minorista.
- Frijol común sin entrega de insumos: 435,000 CUP por tonelada en acopio, con un precio de 285 CUP por libra en venta minorista.
Impacto en la Producción Nacional y Medidas de Control
La medida también tiene en cuenta el contexto de los costos de producción en Cuba, especialmente los elevados gastos en los que incurren los productores nacionales para asegurar y proteger sus cultivos. Yenisley Ortiz Mantecón, viceministra de Finanzas y Precios, comentó que estos precios regulados buscan ser más razonables tanto para los consumidores como para los productores, y que se ha tomado en cuenta el salario de los trabajadores del sector agrícola.
El gobierno cubano ha tomado en cuenta el impacto de la pandemia de la COVID-19 y el recrudecimiento del bloqueo económico estadounidense, factores que afectaron la producción de granos en el país. Con esta medida, se espera un aumento en la producción nacional y una reducción de la dependencia de las importaciones de estos alimentos básicos.
Control Popular y Fiscalización para Evitar Abusos
Además de la regulación de precios, se han implementado medidas para asegurar que estos productos lleguen a los consumidores sin alteraciones. Las autoridades locales y el control popular jugarán un papel fundamental en evitar el acaparamiento y la reventa de los productos a precios más altos. El gobierno ha exhortado a la ciudadanía a ser vigilante y cooperar para asegurar el cumplimiento de estas medidas.
La fiscalización será clave, y se realizarán inspecciones periódicas tanto en los puntos de venta como en los mercados, con el objetivo de garantizar que los precios regulados sean respetados y que no se presenten prácticas ilícitas.
Conclusión
Esta nueva medida del gobierno cubano se presenta como un paso importante para mitigar los efectos de la inflación y aumentar la producción de alimentos esenciales en el país. Sin embargo, su éxito dependerá del control efectivo de los precios y de la cooperación de todos los sectores involucrados.
